:quality(85)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/infobae/COSQGG2RPBGLXJHZR5P3D7XHHY.png?w=360&resize=360,240&ssl=1 "Inauguración del centro de juego más grande de Latinoamérica en Perú")
En la madrugada del 21 de julio de 1553, ocho navíos aparecieron a toda vela al norte de Santa Cruz de La Palma, dejando atrás las costas de Puntalana, los cuales, con buen viento, arribaron antes de lo previsto al puerto de la ciudad.
Santa Cruz de La Palma izó este viernes la bandera pirata, un día tan histórico como icónico para la capital de la isla, que tardó unas horas en viajar hasta el siglo XVI, haciendo una vez más todo lo posible para proteger la ciudad. cuesta, como lo hizo antes del ataque de Francois Leclerc. Pata de Peg en 1553. Vuelve a la vida el legendario Baltasar Martín, líder de los palmeros más valientes que acudieron a proteger su ciudad en los tiempos de mezquindades y tropelías de los corsarios de Pata de Palo.
Las calles de la ciudad se llenaron del color de las ropas de estos voluntarios vestidos de eras, al son de danzas y cañones, gritos de fuga y secuestros, defensa valiente de hombres y mujeres palmeros, como Baltasar Martín o Melchora de Socaras. , alzaron la cabeza y los brazos ante la figura del malvado francés, llamado “La Pata de la Clavija”, cuyas fechorías eran conocidas en todo el Atlántico.
Así se celebra la octava edición de Día del Corsario, un montaje teatral presentado por la Asociación Cultural Día del Corsario, en el que, siguiendo las crónicas de Gaspard Fruttuoso, se narra el famoso ataque del corsario Francois Le Clerc a la capital. de Palma, que acabó con el incendio de la ciudad tras robos, robos y secuestros.
La Asociación Cultural Día del Corsario, en colaboración con las Concejalías de Cultura y Fiestas del Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma, moviliza a más de 200 participantes en una puesta en escena que ocupa gran parte del centro histórico de la capital palma , como las plazas de La Alameda, San Francisco, España y Santo Domingo.
La actuación comenzó en el Museo Naval de Santa Cruz de La Palma y finalizó en la Plaza de Santo Domingo, con varias escenas que llevaron a los espectadores de un punto a otro de la ciudad mientras esperaban conocer el desenlace de la historia. Esta es una de las actividades de verano. los más impresionantes, muchos de los cuales tienen lugar en las Islas Canarias en agosto.